La Oficina del Fiscal Público Europeo (EPPO) ha arrestado a un sospechoso y llevado a cabo seis registros en Alemania como parte de una investigación sobre fraude fiscal por valor de 5.8 millones de euros relacionado con la venta de coches de lujo. En la operación se incautaron 40 vehículos valorados en 1.2 millones de euros, así como bienes raíces y 40,000 euros en efectivo. La investigación, denominada 'Dutch Windmill', se inició en septiembre de 2024 y revela un esquema que manipulaba las normas del IVA entre concesionarios alemanes y holandeses para evadir impuestos. Se estima que el grupo detrás del fraude generó más de 30 millones de euros en ingresos fraudulentos.
La Oficina del Fiscal Público Europeo (EPPO) ha llevado a cabo una operación significativa en Colonia, Alemania, en el marco de una investigación sobre fraude fiscal relacionado con el IVA. En esta acción, los investigadores fiscales y policiales realizaron seis registros y confiscaron 40 automóviles de lujo valorados en aproximadamente 1,2 millones de euros, además de bienes inmuebles y 40,000 euros en efectivo. Como resultado de estas operaciones, se ha detenido a una persona.
La investigación, conocida bajo el nombre clave 'Dutch Windmill', comenzó en septiembre de 2024 tras hallazgos relacionados con una investigación en curso realizada por la EPPO en Róterdam, Países Bajos, sobre la venta de vehículos usados.
Se estima que el volumen total fraudulento del grupo involucrado supera los 30 millones de euros, con un daño fiscal por IVA calculado en al menos 5,8 millones de euros.
Fraude fiscal con vehículos de segunda mano
Las pruebas indican que el director general de un concesionario alemán vendió automóviles usados a distribuidores holandeses, quienes supuestamente manipularon las normas del IVA para reducir el impuesto aplicable a las ventas. En lugar de declarar que los coches alemanes habían sido propiedad de un concesionario, los distribuidores holandeses afirmaron falsamente que los vehículos habían pertenecido y sido revendidos por particulares.
Bajo las regulaciones del IVA, cuando un particular vende un vehículo, el impuesto ya no es aplicable al precio total del automóvil, dado que este ya habría sido pagado en la primera compra (sistema de margen). Por lo tanto, solo se grava el margen de beneficio del concesionario, lo que permitió a los sospechosos evadir una cantidad considerable de IVA en los Países Bajos.
Dicha actividad fraudulenta también permitió obtener un mayor margen de beneficio para los vendedores, quienes adquirieron los vehículos a un costo menor y pagaron menos impuestos, generando así competencia desleal.
Papel del sospechoso alemán
Según la investigación, el concesionario alemán estaba al tanto de la tergiversación en la historia transaccional de los vehículos y sabía que se trataba efectivamente de transacciones entre concesionarios. Como consecuencia, sus suministros intracomunitarios originalmente exentos del IVA deberían estar sujetos retrospectivamente al impuesto alemán. Este individuo fue arrestado hoy.
La investigación contó con el apoyo de las oficinas fiscales alemanas en Düsseldorf y Münster, así como del Departamento Policial Criminal en Münster.
Todas las personas implicadas son consideradas inocentes hasta que se demuestre su culpabilidad ante los tribunales competentes alemanes.
La EPPO actúa como la oficina pública independiente encargada dentro de la Unión Europea para investigar y procesar delitos contra los intereses financieros del bloque comunitario.
Descripción | Cifra |
---|---|
Valor total del fraude | €30,000,000 |
Daño estimado por IVA | €5,800,000 |
Valor de los coches de lujo confiscados | €1,200,000 |
Cantidad de dinero en efectivo confiscado | €40,000 |
En una investigación liderada por la Oficina del Fiscal Público Europeo (EPPO) en Colonia, Alemania, se llevaron a cabo seis registros y se incautaron 40 coches de lujo valorados en aproximadamente 1.2 millones de euros, así como bienes raíces y 40,000 euros en efectivo. Una persona fue arrestada.
El volumen total fraudulento del grupo detrás del esquema se estima en más de 30 millones de euros, con un daño estimado por IVA de al menos 5.8 millones de euros.
El director gerente de un concesionario alemán vendía coches usados a concesionarios holandeses que manipulaban las reglas del IVA para reducir el impuesto debido en las ventas de vehículos. Declaraban falsamente que los coches habían sido previamente propiedad de individuos privados para beneficiarse del sistema fiscal.
Se sospecha que el concesionario alemán estaba al tanto de la tergiversación de la historia de las transacciones y que las ventas eran realmente transacciones entre concesionarios. Por lo tanto, sus suministros intracomunitarios originalmente exentos de IVA deberían estar sujetos retrospectivamente al IVA alemán.
La investigación contó con el apoyo de las oficinas de investigación fiscal alemanas en Düsseldorf y Münster, así como del Departamento de Policía Criminal en Münster.
Todas las personas implicadas son consideradas inocentes hasta que se demuestre su culpabilidad ante los tribunales competentes alemanes.