La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha destacado que las movilizaciones contra el genocidio en Gaza han convertido el dolor en dignidad colectiva. Durante su intervención en la Conferencia Más Allá del Crecimiento, Rego criticó los proyectos coloniales y abogó por la audacia y el amor como herramientas políticas para construir un modelo alternativo al capitalismo actual, que perpetúa la explotación y desigualdad. También enfatizó la necesidad de transformar la empatía en acción y de luchar por un mundo nuevo que priorice los derechos de las personas migrantes, mujeres y colectivos vulnerables.
La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha manifestado esta mañana que, en respuesta a los “proyectos coloniales de los poderosos”, como los representados por figuras como “Trump o el sionismo”, “millones de personas se han levantado y han decidido no callar más”. En este contexto, Rego ha afirmado que las movilizaciones contra el genocidio en Gaza han logrado “transformar el dolor en dignidad colectiva”.
Durante su intervención en la Conferencia Más Allá del Crecimiento, celebrada en el Congreso de los Diputados, la ministra hizo un llamado a “la audacia y el amor como gesto político” ante un sistema capitalista que considera obsoleto. Según Rego, este modelo actual reproduce la explotación y la desigualdad, además de agotar tanto al planeta como a la clase trabajadora.
Rego destacó cómo la extrema derecha ha sabido utilizar el miedo como herramienta cultural para consolidar los privilegios de quienes están en el poder. En este sentido, abogó por “convertir la empatía en acción”, transformando la vulnerabilidad en una fuente de poder y promoviendo un cuidado colectivo que desafíe las injusticias sociales.
La titular de Juventud e Infancia advirtió que el capitalismo ha desvelado su verdadera naturaleza ante una serie de crisis interconectadas, liberando lo que ella describe como “la bestia autoritaria”. Este nuevo orden impuesto perjudica especialmente a grupos vulnerables como migrantes, mujeres, ecologistas y miembros del colectivo LGTBIQ+, así como a la clase trabajadora en general.
Por ello, Rego instó a imaginar y construir un mundo diferente. Hizo hincapié en que es necesario ser agentes activos en lugar de conformarse con ser un mero “muro de contención” frente a un modelo que se está descomponiendo. La ministra cerró su intervención subrayando la importancia de soñar con un futuro radicalmente distinto al actual.
Sira Rego ha afirmado que estas movilizaciones han "transformado el dolor en dignidad colectiva".
Rego critica el capitalismo, describiéndolo como un sistema que reproduce explotación y desigualdad, y que está dañando tanto al planeta como a la gente trabajadora.
Rego apela a "la audacia y el amor como gesto político" para construir un modelo radicalmente distinto al capitalismo en descomposición, instando a convertir la empatía en acción y transformar la vulnerabilidad en poder.
Rego señala que la extrema derecha utiliza el miedo como motor cultural y ha roto el tablero para proteger los privilegios de los poderosos.
Menciona que las personas migrantes, las mujeres, los ecologistas, el colectivo LGTBIQ+ y, en general, la gente trabajadora son quienes más sufren bajo este sistema.