La Guardia Civil y la FEMP han inaugurado las XX Jornadas sobre colaboración de las Policías Locales y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado titulada “Respuesta policial ante el terrorismo yihadista”.
Al acto han asistido la Presidenta de la Comunidad Madrid, Cristina Cifuentes; el Director General de la Guardia Civil, José Manuel Holgado y el Secretario General de la FEMP, Juan Ávila, entre otras autoridades.
Las Jornadas se van a desarrollar durante hoy y mañana en el auditorio de la Sede de la Presidencia de la Comunidad de Madrid. Se van a celebrar conferencias y mesas redondas en las que se van a tratar temas referentes a la seguridad pública, la seguridad vial y la innovación, calidad y servicio.
Cuentan con ponentes como el Coronel de la Guardia Civil Santiago Mato, de la Secretaría de Estado de Seguridad; Francisco José Vázquez,Teniente Coronel de la Jefatura de Información de la Guardia Civil; José María Blanco, del Centro de Análisis y Prospectiva de la Guardia Civil; Josep Palaouzié i Vizcaya, Jefe de la Policía Local de Palma; David Garfella, Inspector de la Policía Local de Silla (Valencia) y profesor colaborador del Instituto Valenciano de Seguridad Pública (IVASPE); José Luis Carque, Jefe de la Policía Local de Castellón de la Plana; José Luis Mayorga; Comandante de la Jefatura de Información de la Guardia Civil; Manuel Gazapo, Director del Internacional Security Observatory; Antonio Salinas, gerente de Innovación y Calidad de Prosegur; Miguel Ángel García, 2º Jefe de Policía Local de Fuenlabrada y representante español en Strong Cities; además de representantes del Estado Mayor del Mando de Operaciones Territoriales y de la Unidad de Acción Rural de la Guardia Civil; representantes de la FEMP y de la Consejería de Presidencia de la Comunidad de Madrid.
El Director General de la Guardia Civil ha remarcado que pocos temas hay de tanta actualidad y repercusión profesional para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad como la lucha contra una de las mayores amenazas para la seguridad internacional: el terrorismo yihadista, un tipo de terrorismo, brutal e indiscriminado, que se materializa de forma global en todo el mundo, aunque con diferentes consecuencias.
En este sentido ha destacado que, en lugares como África, Oriente Medio o Asia, los terroristas consiguen combinar su acción con conflictos enraizados y otros fenómenos criminales, como los tráficos ilícitos, incidiendo en la fragmentación de las sociedades y mermando las capacidades de desarrollo de los estados que lo sufren.
Por otro lado, ha señalado que, en Occidente, a pesar de no suponer una amenaza existencial a los sistemas democráticos, las acciones terroristas provocan un enorme impacto internacional, con graves consecuencias derivadas, las cuales se van a abordar a lo largo de este seminario.
José Manuel Holgado ha señalado que en Europa asistimos a procesos de radicalización exprés, de conversión de individuos que no tenían ningún conocimiento religioso, de radicalización de criminales en prisiones sin vínculos previos con el extremismo yihadista, y al uso de las nuevas tecnologías como herramienta de propaganda o adoctrinamiento y que el producto final de esta amenaza es la actuación de terroristas, muchas veces autónomos, que, inspirados en la ideología del DAESH, están dispuestos a morir en su actuación y llegan a materializar acciones terroristas individuales, utilizando medios poco sofisticados para su ejecución y buscando el mayor daño posible ante los denominados objetivos blandos: zonas turísticas, eventos de elevada concurrencia, etc., atacando a nuestro modo de vida. A esto hay que añadir el riesgo que supone el retorno de combatientes, desde las zonas de conflicto, tras adquirir experiencia en combate y con conocimientos más sofisticados en métodos y tácticas terroristas.
José Manuel Holgado ha señalado que España es objetivo permanente de la amenaza yihadista, tanto en un sentido amplio, como miembro de la comunidad internacional occidental, como en un sentido concreto por la confluencia de sus propias particularidades históricas, sociales y geográficas, agravado por el significado de “Al Andalus” en el imaginario yihadista entendido como una referencia simbólica a un período de esplendor que pretenden recuperar.
Ha referido que nos encontramos ante un fenómeno cuya lucha requiere una estrategia integral y transversal por parte de todas las administraciones y cuyo punto inicial debe ser una adecuada evaluación de riesgos, ya que la amenaza terrorista muta, evoluciona y se adapta; cambian los grupos, el modus operandi, los objetivos, y las armas empleadas y también varía según el momento y el lugar.
El Director General ha destacado que el Plan Estratégico Nacional de Lucha contra la Radicalización Violenta involucra en esta función a la Federación Española de Municipios y Provincias y al ámbito local, así los municipios españoles, en sus diferentes servicios al ciudadano, que son clave en la lucha contra la radicalización violenta, actuando mediante políticas integrales, entre las que destacan las de carácter social, educativo y asistencial.
Holgado ha señalado en este sentido que, desde el año 2001 hasta la actualidad, la Guardia Civil ha llevado a cabo, en este ámbito, la explotación de 79 operaciones contraterroristas, de las que más de la mitad (concretamente 49) se han desarrollado en los últimos tres años, con un total de 199 detenidos. Además, según el último informe de Europol, el pasado año, España fue el tercer país de la Unión Europea donde más detenciones de terroristas se realizaron, lo que demuestra la eficacia de nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
El Director General de la Guardia Civil ha finalizado su intervención señalando que la prevención y la investigación son esenciales para luchar contra este tipo de terrorismo, y que en un primer momento son las Unidades territoriales, las Policías Locales y los Puestos de la Guardia Civil, los más cercanos al ciudadano y que estas Unidades deben reaccionar de forma apropiada en caso de un ataque o una acción terrorista, por lo que el establecimiento de planes de actuación que estén en constante actualización se hace fundamental.
Ha destacado especialmente la importancia que, en momentos como los actuales, adquiere la colaboración y coordinación policial, permitiendo establecer mecanismos que faciliten la inmediatez y fluidez en la colaboración, así como protocolos que permitan ser activados de manera automática en caso de necesidad.