Una complicidad que “ya no disimulan ni lo ocultan. Ya no se trata de normalizar a la extrema derecha. Se trata de asumir sus postulados”, sin olvidar, remarcaba, que “lo peor no es que una formación haya parasitado a la otra, lo peor es quién ha parasitado a quién. Sólo así se explica que, incluso donde no tienen necesidad de gobernar juntos, como en Andalucía, el Partido Popular esté dispuesto a herir de muerte a un tesoro de la naturaleza como es Doñana”, así lo afirmaba el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, durante su intervención en la clausura las Jornadas del Grupo S&D que se están celebrando en Madrid, acompañado de la secretaria de la Unión Europea del PSOE, vicepresidenta Primera del PES y presidenta del Grupo S&D, Iratxe García.
"Se puede frenar a la ultraderecha"
“El pasado 23 de julio, la sociedad española lanzó un mensaje de enorme valor simbólico y también de gran alcance europeo: los españoles y las españolas dijeron con su voto nítidamente a toda Europa, que la ultraderecha no es imparable, que se puede frenar a la ultraderecha, que a pesar de que la derecha tradicional haya claudicado y se haya sometido a la ultraderecha, dijeron que es posible otro camino, es posible otro futuro. Y fue aquí, en España, donde los votos frenaron esa ola de la ultraderecha. Nos toca ser más europeos y más socialistas que nunca, para frenar a la ultraderecha”.
En su intervención, Sánchez ha recordado que el mundo vive momentos de transformación sin precedentes “el mundo se enfrenta a las consecuencias de un modelo neoliberal de globalización, al crecimiento de las desigualdades entre países y dentro de cada país, y a movimientos migratorios descomunales”.
En definitiva, “se enfrenta al desafío de la emergencia climática y a la necesidad de la transición energética, a la cuarta revolución industrial y a la necesidad de la transición digital. Y encara el triunfo del feminismo y la derrota definitiva del patriarcado”.
Unos cambios, que tal y como ha reconocido, generan desconcierto y temor en sectores muy amplios de una población que los vive con temor y desconcierto ese temor y ese desconcierto es el que alimenta la ola reaccionaria. Y enfrente, solo hay una alternativa: la respuesta social y demócrata”, ante esto, ha destacado la importancia de “atender a las preguntas ofreciendo certezas”.
Porque para Sánchez, cada elección celebrada en cada rincón de Europa, cada pugna nacional o continental “es un capítulo más dentro de la pugna global en la que estamos inmersos: el duelo entre el extremismo reaccionario y la respuesta social y democrática; la respuesta europeísta. Es una dinámica que condiciona ya el presente político en nuestros propios países. Y por eso mismo es la principal amenaza para el futuro de la Unión y la propia supervivencia del proyecto europeísta”. Remarcando que “o prevalece la socialdemocracia o se impone la ola reaccionaria y eso sería el comienzo del fin de Europa”.
Por ello, Pedro Sánchez ha querido trasladar un mensaje a la derecha que afloja los cordones sanitarios y que se rinde ante la ola reaccionaria. “A la derecha, que ahora se suma al negacionismo del cambio climático, como acabamos de ver con la tramitación en el Parlamento europeo de la Ley de Restauración de la Naturaleza”. “Es hora de que el “Adelante” de los Socialistas y Demócratas resuene con mucha más fuerza que el “Atrás” de los involucionistas. Con mucha más convicción y orgullo”, ha sentenciado.
Orgullo, para el secretario general de los socialistas “por la extraordinaria labor que habéis desarrollado desde el Grupo de Socialistas y Demócratas, decisiva para definir el rumbo de la Unión durante esta legislatura: con la respuesta histórica, conjunta y valiente a la pandemia, la elevación de la sostenibilidad y la igualdad como ejes prioritarios de transformación, el impulso del mecanismo SURE para la protección del empleo, o la extraordinaria respuesta colectiva de futuro que representan los fondos Next Generation”.“En ese afán, podéis contar con una España dispuesta a tirar del carro. Pero necesitamos además el impulso de una Europa fuerte y unida. Una Europa en la que la voz de los socialistas y demócratas sea determinante para impulsar políticas de progreso”.
Para hacerlo posible, Pedro Sánchez ha concluido resaltado dos premisas: “Estando siempre al lado de la sociedad civil. Afrontando los problemas reales de la gente, los que marcan su día a día y llevan incertidumbre a millones de hogares: un salario justo para tener una vida digna, servicios públicos de calidad, una educación pública que impulse la movilidad social, acceso a la vivienda o pensiones decentes”.
En segundo lugar, ha destacado que “debemos ser valientes a la hora de conciliar nuestras señas de identidad como socialistas con propuestas decididas de avance y transformación”.
Si (
No(
