El órgano de gobierno de la Cámara da luz verde a la Ley más polémica de los últimos años después del informe jurídico de los letrados de la Cámara en el que señalaba que el texto del PSOE no presenta una "contradicción palmaria" con la Constitución que motivara su veto.
Los socialistas se han marcado fecha para aprobar la ley en el Congreso, que sería en diciembre, para su remisión al Senado, donde el PP con su mayoría absoluta podría ralentizar la tramitación hasta dos meses más tarde.
El PP no lo consigue
La Mesa del Congreso se ha pronunciado sobre el escrito del PP pidiendo recusar al secretario general Congreso, Fernando Galindo, para que no pudiera emitir informe ni asesorar a la Cámara durante la tramitación de la citada iniciativa legislativa.
Consideran que Galindo carece de "imparcialidad y objetividad" para informar sobre esa iniciativa por haber sido hasta hace unas semanas subdirector en el Ministerio de Política Territorial y por haber ejercido su esposa hasta las mismas fechas como directora general del Relaciones con las Cortes en Moncloa.
No obstante, PSOE y Sumar han señalado que "no hay lugar" a la recusación, y menos con un motivo que "no es cierto".
El secretario primero de la Mesa y diputado de Sumar, Gerardo Pisarello, se ha congratulado de que el PP no haya conseguido bloquear la tramitación de la ley, "de la misma manera" que en anteriores semanas se han calificado propuestas de Vox que considera "una aberración política".
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