Los incendios intencionados que asolan el Amazonas tienen como objetivo cambiar el uso del suelo, dando paso a una agricultura industrial a gran escala. De esta manera, se da respuesta a la demanda de la Unión Europea de productos básicos que se cultivan en terrenos que antes eran bosques.
Antes que nada, y para que se queden tranquilos, el "pulmón del planeta" son los océanos, no los árboles, ya que generan entre el 50 y el 90% -según cuál experto- del oxígeno global gracias al fitoplancton marino.