"La conjura de Rita" es como ya se conoce al documento que han firmado los portavoces parlamentarios del Grupo Popular, Podemos, Ciudadanos, Compromís y el PSOE, en el que se insta a la exalcaldesa a "renunciar a su acta de senadora para salvaguardar la dignidad de la representación de los valencianos y valencianas".
Pese a que Barberá aceptó el pasado miércoles darse de baja en el partido, como le solicitaba la dirección popular, se aferra con fuerza a su escaño y, sobre todo, a su posición de aforada. Hasta su compañera y (antes) amiga, Isabel Bonig, presidenta actual del PP valenciano, ha presentado otra resolución que insta a "buscar mecanismos para, en caso de interés general o causa judicial, se articulen medidas para revisar o remover nombramientos de cargos públicos".
"Se ha decidido mantenerla en el grupo mixto y legalmente no se puede hacer nada", lamenta, a la vez que considera que renunciar al escaño no habría supuesto "un reconocimiento de culpabilidad" sino una "salida digna" a la "brillante trayectoria de Rita Barberá, con sus luces y sus sombras".
Unas palabras que contrastan con las de Javier Maroto, vicesecretario de sectorial del PP: "Es evidente que no renuncia al escaño para conservar el aforamiento y esa decisión no cumple los requisitos de dignidad y ejemplaridad que deben regir la política, un servicio público", ha dicho. Maroto cree que Barberá "se ha equivocado" y que al permanecer en el Senado "solo está prolongando su calvario". "Se va a encontrar con que su propio partido en Valencia vota a favor de que deje el escaño".
Rajoy, fiel hasta el último minuto
Barberá mantuvo su postura hasta el último segundo. Finalmente, a las 17.30 de la tarde del pasado miércoles, acataba la orden del PP y hacía llegar a sus ex compañeros un comunicado en el que expresaba su voluntad de darse de baja en el partido, no así de dimitir en el Senado, ya que "podría entenderse como una asunción de culpabilidad".
Cabe recordar que Mariano Rajoy no ha intervenido en la negociación con Barberá ya que, como ha señalado en alguna que otra ocasión, la considera su amiga personal. En este sentido, la secretaria general del partido, Dolores de Cospedal, y el vicesecretario de organización, Fernando Martínez-Maillo, han sido quienes han hablado estos días con la senadora con el fin de hacerla entrar en razón, tras las múltiples críticas de, entre otros, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera: "Echo en falta liderazgo en Rajoy. Ha desaparecido. Puede hacer declaraciones pidiéndole el escaño. No sé por qué no lo ha hecho. Debería".