El Tribunal Supremo ha decidido que el impuesto de las hipotecas tiene que pagarlo el cliente. El pleno de la Sala de lo Contencioso-administrativo así lo ha determinado tras dos días de debate y por solo dos votos de diferencia.
15 magistrados han votado a favor de que pague el banco y 13 de que se mantuviera el criterio fijado el 16 de octubre y que cambiaba la jurisprudencia que había mantenido hasta ahora el alto tribunal.
Los 28 magistrados se han reunido durante 15 horas (divididos en cuatro sesiones de mañana y tarde en dos días) y las sentencias, con los argumentos de los magistrados (revisaban tres casos por lo que habrá tres resoluciones), se conocerán en los próximos días.
Pese a que no había una mayoría clara hacia una postura u otra, todo parecía inclinarse hacia los partidarios de mantener la jurisprudencia establecida hace dos semanas.
Sin embargo, parte de los magistrados defendía que había que dejar de lado la decisión del 16 de octubre y volver a la jurisprudencia que estaba consolidada en el Supremo y que establecía que debía pagar el cliente que firma la hipoteca, ya que no había ninguna razón jurídica que justificara el cambio de criterio ni la nulidad del artículo 68 del reglamento que regula el impuesto y que fijaba expresamente que el sujeto pasivo (quien tiene que pagarlo) es el consumidor.
Fue el presidente de la sala, Luis Díez-Picazo, el que inclinó con su voto la balanza hacia el resultado final, tras dos semanas de auténtico caos jurídico. Era el último en votar y cuando llegó su turno el resultado era de 14 votos a favor y 13 en contra.
Si (
No(
