El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, anunció la concesión de la nacionalidad española a casi 170 descendientes de miembros de las Brigadas Internacionales que han solicitado este derecho bajo la Ley de Memoria Democrática. Durante un acto en el Auditorio Nacional de Música en Madrid, Sánchez destacó la importancia de reconocer a estos compatriotas como parte de una defensa activa de la democracia. Además, se comprometió a acelerar la disolución de la Fundación Francisco Franco y a publicar un catálogo de símbolos contrarios a la memoria democrática antes de finalizar noviembre. En su discurso, enfatizó la necesidad de recordar y honrar a las víctimas del golpe militar y la dictadura, subrayando que la democracia es un logro colectivo que debe ser defendido ante los intentos de revisionismo histórico.